La Noche de las Camisas Negras

Dos días después de que ha terminado el concierto de Iron Maiden en el Estadio Ricardo Saprissa en San Jose de Costa Rica, me pongo a pensar en los miles de fans que asistimos con la camisa negra con el logotipo de nuestra banda favorita, Maiden, Antrax, Queen, Led Zeppelin y un sinfín de nombres interminable.

También recuerdo la forma en que algunas personas comentan de forma despectiva y llenan de estereotipos a los mentados fans de chemas negras.

Según la definición que nos da la RAE, “un estereotipo consiste en una imagen estructurada aceptada por una mayoría de personas como representativa de un determinado colectivo. Esta imagen se forma a partir de una concepción estática sobre las características generalizadas de los miembros de esa comunidad”.

Es normal escuchar términos como pintas, marihuanos, vagabundos, rateros, mechudos, etc… solo por el hecho de vernos con una simple camisa negra. Por el contrario que contento me sentía yo ese día de toparme amigos y conocidos en la misma escena, grandes personas que se desarrollan como profesionales responsables en sus respectivos campos, ingenieros, profesores, un micro-biólogo, un médico general por acá, un ortopedista por allá, padres de familia que iban con sus hijos a compartir un momento único, estudiantes que tienen en mente forjar un mejor futuro, amigos que trabajan en algún Call Center, tiendas, o fábricas, Amas de casa y hasta una abuelita rockera dispuesta a sentir el ritmo de su banda favorita.

El tiempo tampoco es cuestionable, Cada persona lo organiza como mejor le parece, una decisión de hacer fila 15 días o llegar 5 minutos antes de iniciar el concierto es un asunto muy personal. Lo cierto es que cada quien es libre de administrar su tiempo e imagen y nadie lo debe cuestionar. No se vale que por una mala percepción, creencia religiosa o simplemente por no compartir un gusto musical se quiera generalizar. No olviden que esa pinta de Chema negra en cualquier momento le puede salvar la vida, podrá ser la persona que ayude a formar a sus hijos en las aulas, podrá ser la persona que con su trabajo le brinde los servicios que necesite y así podríamos seguir enumerando cosas positivas.

También es interesante que sepamos, al terminar el concierto no se había presentado ningún problema donde la policía debiera intervenir, ya eso deja mucho que decir del comportamiento y educación de aproximadamente 20.000 personas, cosa que no sucede en los eventos medio masivos de los domingo donde los fans visten la Chema de equipo favorito y terminan medio matándose con sus rivales.

Termino mi comentario preguntando: Realmente somos lo que “algunos” creen que parecemos ser???

Chisco